De como una peladita de 14 años me enloquecio hasta poder poseerla.
Tengo que contarle a alguien esto. Soy un tipo normal de 30 años casado con 1 hijo de 4 años. Hace poco armamos un paseo con algunos amigos y fuimos a una finca que alquilamos a las afueras de la ciudad. Queda a 2 horas de camino. Al paseo fuimos aproximadamente unas 18 personas cada uno con sus familias. Yo con mi señora mi pequeño y los otros amigos con sus familias. Uno de mis compañeros llevo un amigo que yo no conocía, él tenía una hija de 14 años.
Como cualquier paseo llegamos nos cambiamos y empezamos a beber. Al segundo día luego de la fiesta de la noche anterior. Sobre las 9 de la mañana todos estaban dormidos aun de la resaca y solo los niños estaban ya despiertos y jugando en la piscina, yo estaba frente a esta con aun un poco de la borrachera del día anterior. Me quede mirando como jugaban los muchachos. Isabel, la niña de 14 años estaba con ellos. Ella es una morena de rostro fuerte atractiva con un deje de adolescente irritante y con una mirada de me importa todo nada. No me agrado la peladita. Veo que entra al baño y se cambia para ir a la piscina. Me llamo la atención que no tenía vestido de baño. Se había dejado un short blanco y una camiseta un poco suelta de mangas cortas. Como estaba jugando a lanzarse repetidas veces al agua, siempre salían del lado en el que yo estaba. Así que me quede mirándola bastante tiempo. La camiseta mojada resaltaba sus peoncitos y no podía dejar de verlos. Sobre las 12 del día todos despertaron y empezaban a hacer el almuerzo (un asado). Isabel quedo con las mismas ropas que luego el sol secó Yo ya estaba muy caliente y no dejaba de verla. Me ponía las gafas para que nadie más notara como la observaba. Ella si lo noto y me miro terriblemente mal. Como con cara de este verde que me mira.
Luego del asado la gente se enrumbo de nuevo. Solo que para las 8 ya todos estaban caídos. Mi mujer estaba con mi hijo y quiso acostarse temprano para el domingo ir a misa en el pueblo (Ella es muy católica). Isabel se bañó se colocó un camisón corto y un short del mismo color. Se le veían sus rizos aun húmedos. Y sentada frente al tv mirando la tele. Yo me acerque y le dije que si podía acompañarla. Haga lo que quiera me respondió. Allí me quede. De cuando en vez la miraba de arriba abajo. Solo pensaba en sus pequeñas téticas duritas que había visto en la mañana. En una de esas miradas a mí se me empezó a poner duro el pene. Isabel se dio cuenta, me abrió los ojos con cara de susto. Y le pique un ojo. La niña se paró y se fue a su cama sin decir nada. Yo me quede un rato y seguí acariciándome el pene sobre el pantalón. Me acomode mi aparato cosa que quedara erecto pero sin quitarme la ropa y con la punta de mi pene en el ombligo me acariciaba el glande con la punta de los dedos. Al rato llegaron todos y después fuimos a dormir.
Sobre las 2 de la mañana me desperté y fui al baño. Al salir vi que estaba Isabel en la sala. Allí empecé a tocarme mirándola. Me temblaba todo pensando que me vieran pero al tiempo me excitaba. A los dos minutos me di cuenta que estaba despierta y se estaba haciendo la dormida. Me aleje como si fuera para mi cama y me quede espiándola un rato. A los dos minutos abrió los ojos se descubrió y vi que esta criatura estaba era masturbándose, ella metía las manos en su short y con la otra mano se acariciaba un seno. Vi todo masturbándome hasta que termino y ella luego se pasó a su cuarto. No me vio. Fui a la cama y trate de dormir pensando en ella.
El lunes festivo quedamos de ir a ver unas cascadas como a 1 hora de trayecto. Como mi carro era muy bajo para poder meterlo por trocha, nos acomodamos en las camionetas. Yo notaba como Isabel me evitaba, pero para fortuna mía la bajaron de uno de los carros y la subieron al vehículo donde iba yo. En el puesto de atrás íbamos 4 personas, No muy cómodos a los 20 min le dije a mi señora que porque no la subía en las piernas para ir mas cómodo a lo que ella me respondió. Porque no llevas a Isabel que es más liviana. Ella no quería. Pero mi mujer la convenció que iba a ir más cómoda. Paramos nos acomodamos y arrancamos. Cuando entramos a la trocha el sube y baja con esta niña sentada en toda mi verga hizo que se me pusiera muy dura. Ella lo noto allí mismo y me miro de nuevo muy mal. Solo que esta vez coloque cara de avergonzado y le dije si quieres paramos y volvemos a como estábamos si no estás cómoda. Ella miro mi mujer y dijo: “No hay problema sigamos así que ya vamos a llegar”. Los 10 minutos siguientes fueron increíbles yo tenía la respiración agitada miraba para afuera y ella con sus nalguitas sobre mi pene. No aguante y termine viniéndome en el pantalón. Hice mil maromas para que nadie lo viera. Trate de secarme con unas servilletas y afortunadamente el pantalón era oscuro y no se notó. Con agua de una botellita me limpie y durante el día se secó.
El regreso nos acomodamos de forma diferente y termine sentado en el puesto de adelante solo. Esa noche empacamos y nos alistamos para regresar todos. En la finca estaban todos en frente de la piscina y yo me quede alistando maleta. Cuando vi que Isabel salió del baño envuelta en una toalla corriendo al cuarto. Yo aproveche y me metí al baño. Estaba tomando mis cosas de aseo personal cuando veo en una esquina la ropita de ella que había tenido en el día envuelto en una esquina. Me agache y busque y encontré sus cacheteros. Los tome y empecé a olerlos. Olían a sexo (o eso quería pensar yo). Allí me pegue el susto de mi vida cuando oigo a mis espaldas ¿Usted que está haciendo? Me gire y era Isabel. Se me acerco me rapo los cacheteros y se entró al cuarto. Estaba muerto del susto de que fuera a hacer esta niña. Me quede muy intranquilo y finalmente salimos todos trate de acercarme pero me evitaba por todo lado. Mi mujer también me pregunto que me pasaba. Le dije que eran cosas del trabajo. Nos alistamos y salimos. Llegue a la ciudad con el corazón en la mano.
Esa misma noche me metía internet tratando de encontrar a Isabel en Facebook. Para hablar con ella. La agregue y le escribí un mensaje que decía que me perdonará que por favor no le dijera a nadie que lo que pasaba era que me gustaba. A los 10 min respondió. ¿De verdad le gusto? Allí empezamos a chatear.
-Si Isabel me gustas mucho. Por eso te miraba tanto en la piscina.
-Pero usted está casado que quiere con alguien de 14 años.
-Yo sé que es una locura pero pues yo no pedí esto. Solo sé que me llamaste mucho la atención.
– Vale… fresco que no le voy a decir a nadie. Chao.
Yo me fui a dormir tranquilo. En los siguientes meses seguía mandándole mensajes de cuando en vez pero no me respondía.
Pasaron 6 meses. Y nos invitaron a un bautizo de unos amigos y o sorpresa la familia de Isabel estaba allí. Igual que Isabel. Ella estaba con un pantalón de dril café y una camiseta de esqueleto verde con un saquito gris encima. Busque la oportunidad y en la cocina estaba ella. Entre y le pregunte que porque me había ignorado todo este tiempo. Me respondió. Porque esto no puede ser. Me acerque le puse las manos en el hombro y apreté mi pene contra su culito y al oído le dije: “ te acuerdas de haber estado así de cerca” ella asintió con la cabeza.
– Te molesto esa vez?
– No, dijo con la cabeza.
– Y ahora te molesta? ( ya la tenía dura y me restregaba contra ella)
– No, dijo de nuevo con la cabeza mirando al suelo.
– En esas la llamaron. Me miro y me dijo hablamos por Facebook me dio un pico en la mejilla y se fue.
Yo me fui al baño me masturbe. Y esa noche le hice el amor a mi mujer pensando que era Isabel.
La siguiente noche entre a internet y chateamos. Ella solo me repetía que no podía ser que yo era mayor que ella, que yo que le veía. Y solo le repetía que me encantaba. Así pasó una semana. Y un día me anime caerle de sorpresa a la escuela. Sobre las 3 de la tarde salió ella. Iba a coger el bus que le llevaba a casa cuando pare al lado y le pite. Que yo la llevaba. Miro al cielo, le dije que si me iba a hacer rogarle. Hiso un gesto con la boca de ok. Y subió. Le dije que fuéramos a comer algo. Fuimos al centro comercial y me estacione en el último sótano. No me baje del carro sino que le dije que nos quedáramos un rato allí. Ella tenía puesta una faldita de cuadros medias blancas, y una camisa de botones blanca y un saco de botones del mismo color de la falda. Me acerque y le dije que si me daba un pico como el de esa vez me acerque mientras le ponía la mano sobre uno de sus muslos. Ella miro a todos lados y después me dio un pico.
Dame otro. Y yo ya estaba nuevamente con mi pene muy duro y se me notaba dentro del pantalón. Ella me dijo. Usted como que se arrecha muy rápido. No soy el único, le respondí mientras rosaba mis dedos sobre sus téticas.
Ella se sobresaltó y me dijo Oiga que le pasa?.. déjeme ya en mi casa.
-No te pongas así. Yo sé que te gusta.
No respondió nada.
-Yo te vi ese día en la finca cuando estabas en la sala.
Y que!?, me di cuenta.
-No, yo vi todo lo que hacías.
Marica usted que vio?
Vi cómo te tocabas y te consentías. (Seguí poniéndome muy caliente), Sabes yo también me acaricie en ese momento.
-Quieres ver como lo hacía. Y antes de que me respondiera me abrí la cremallera y me saque el pene. Ella no decía nada.
Ven tócalo, le tome la manito y con un poquito de resistencia la lleve a mi pene. Sentía que temblaba. Y empezó a acariciarme. Yo después de un rato le subí la faldita a sus muslos y lleve lentamente mi mano a su vagina sobre sus cacheteros blancos. Le rozaba la yema de los dedos y empecé a sentirla mojadita. Luego desabotone su camisa y metí mi mano acariciando esos pezoncitos que tenía tantas ganas de besar. En ese tiempo ella nunca soltó mi pene.
Allí le dije. Que porque no me besaba abajo. Nunca lo he hecho. Respondió. Yo te enseño. Y la tome de la nuca y la fui llevando lentamente a que se la metiera en la boca. Sentí sus labios tocando mi glande. Mi pene mojado en su saliva sintiendo su lengua lamer la punta de mi pene. Le susurraba que quería hacerle el amor.
Ella me miro con su clásica malacara y me dijo ¿aquí?
No, aquí no, vamos a otro lado. Lo pensó un rato y dijo. Soy virgen.
Y quieres perder la virginidad conmigo?
-Si, si quiero. Me va a doler?
No, y te va gustar mucho, más que cuando te tocas.
OK pero no me puedo demorar mucho. Antes de 1 hora estas en casa Le respondi.
OK déjeme entonces le digo a mi mama que me voy a la casa de Cata y llamo a Cata para que me haga el cuarto. (Ella nunca me tuteaba)
10 minutos después estábamos saliendo y yendo a un lugar cerca al aeropuerto al que uno puede entrar en carro . Le pedí que se cubriera con mi chaqueta para que nadie la viera. Entre en el sitio y subimos al cuarto.
Gire y le vi sentada con sus dos piernas juntas y con el llavero en sus manos jugando con las llaves muy nerviosa.
Me arrodille frente a ella y le dije. Nada que no quieras se va a hacer. Si en algún momento te arrepientes o no quieres me dices y se acaba. Es tu palabra y fin.
Ella me miro y me dijo. Pero si quiero. Al término de esa frase metí las manitos debajo de su falda y acariciaba sus muslos. Le pedí que se recostara. Y le baje su ropita interior. Estaba súper mojada. Le empecé a dar besitos por la pierna subiendo a su vagina y sentía como temblaba. Le di un besito en el clítoris y con la lengua empecé a lamer esa cuquita rosadita joven. Le quite el saco le desabroche el sostén. Se lo baje. Besaba sus pezones masajeaba sus téticas. Y me puse sobre ella y al tiempo que nos besábamos ponía la punta de mi pene a la entrada de su cuquita. (No me puse condón, no quiera perderme esa sensación). Le dije al oído que si estaba lista. Y sin que me respondiera empecé a metérselo muy despacio. Ella empezó a gemir y con sus débiles manos empujaba mi pecho para que no se la metiera. La sacaba un poquito y volvía y entraba. Hice eso por lo menos unas 10 veces solo entraba la puntica del pene en su húmeda vagina. Llego un punto en el que se acostumbró y en ese momento se la metí hasta el fondo. Gimio muy fuerte me tomo de la cabeza y me abrazo super duro. Ella grito y le dije que si estaba bien. Ella solo dijo sigue sigue.
Le hice el amor delicioso unidos los dos yo dentro de ella con mi pene en su vagina y ella aruñandome la espalda y mordiéndome el pecho. Sentía sus senos muy duros. Llego un punto en el que no aguante más y llegue dentro de ella. Deje todo mi semen dentro de ella. Para cuando acabe ella ya había tenido un orgasmo y estaba cercano al otro. Así que baje me metí debajo de su falda y le chupe su clítoris hasta que tuvo el segundo orgasmo.
Terminamos nos vestimos y la deje en la casa. En el camino ella solo me cogía el brazo me tomaba la mano. Una cuadra antes de dejarla pare para que nadie nos viera. Nos besamos y me dijo al oído te quiero. Se había enamorado de mi.
Afortunadamente ella no se embarazo y los siguientes meses fue de mucha lujuria y sexo. Ahora nos cuidamos mucho. Lo hacemos 1 o dos veces por semana y siempre vamos al mismo lugar.
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