Braguetazo con su profe de la universidad

Hola, me llamo Patricia. Voy a contar una historia que me pasó en mi etapa de universitaria. Por aquel entonces tenía 21 años, estudiaba historia en la universidad autónoma de Barcelona. La verdad que nunca he sido buena para los estudios, prefería salir de fiesta con los amigos que estudiar. Soy morena, ojos marrones, labios carnosos, un popo bajita, 1,65 de estatura, delgadita, pero con unos pechos bastante grandes y culito durito. La verdad que me considero un poco golfilla, ya que nunca he tenido una pareja estable, y en cambio si me he ido con bastantes chicos.

En septiembre empezaban las clases, la verdad que estaba un poco nerviosa y perdida porque era mi primer día en la universidad. Mi primer profesor era un tipo de alrededor de 40 años, alto, delgado y con barba.

Tras la presentación en clase, nos comentó que su método de enseñanza era haciendo muchos trabajos y exámenes sorpresa. Si algo no se entendía concedía tutorías en su despacho, en la última planta del edificio y parecía bastante exigente. Yo no estaba dispuesta a suspender mi primera asignatura de la carrera. Por ello, decidí acudir a su despacho con todas mis armas de mujer, con escote, minifalda, tacones y muy maquillada.

Llamé a la puerta, abrió el profesor, se llamaba Federico, me dijo que tomara asiento, me comentó que prácticamente nadie acudía a sus tutorías, parecía que a nadie le interesaba su asignatura. Posteriormente me pregunto que si me podía ayudar en algo, le dije que era mi primer día y que estaba un poco perdida. Asimismo le comente que necesitaba aprobar su primer asignatura como sea, ya que sus padres no confiaban en ella. Todo esto se lo dije con voz sensual y dejando que me viera el canalillo. Me dijo que era muy exigente, y que si estaba dispuesto a lo que sea a lo que sea… Yo lo le dije que sí. Se levantó se puso detrás mía, y empezó a masajearme la espalda, de repente bajó la mano y empezó a tocarme un pecho. Me volvió a preguntar que si lo que sea… yo le dije q por supuesto… En ese mismo momento me di cuenta de cuál eran sus intenciones, por un lado estaba nerviosa y no quería, pero otro me excitaba la situación. De repente, cerró la puerta del despacho, se acercó y me continuó sobándome el pecho, pero ahora con mucha más pasión. Me comentó que mañana iba a mandar un trabajo, que si quería sacar buena nota tenía que hacer lo que él decía, yo estaba dispuesta a hacer todo lo que él me pidiera a cambio de aprobar. De repente, se bajó su bragueta, y sacó su polla, era una polla de unos 18 cm y gruesa, no estaba mal dotado el profe, sin mediar palabra, me la metió en la boca, me susurró gánate el sobresaliente. En ese momento, me sentí como una autentica prostituta, me daba mucho morbo. Empecé a chuparle la punta, después me la metí toda en la boca, mientras masajeaba sus testículos, luego continué con un movimiento suave de cabeza, aumentando el ritmo, cada vez más, su polla estaba a punto de estallar, cuando me dijo… quiero correrme en tu boca y que te tragues mi semen, empezó a correrse en mi boca, inundándomela, con un líquido espeso y caliente. Me dio mucho asco, la corrida de un desconocido, y finalmente la escupí al suelo. El me dijo que parte no entendía de hacer lo que él decía, así íbamos mal, me comentó. Me dijo que por favor que tenía mucho que trabajar, que si podía salir de su despacho. Salí del despacho con una sensación rara.

Al día siguiente el profesor mandó un trabajo, la verdad que yo pasé de él, no hice nada del mismo, ya que yo era una alumna privilegiada. A los dos días publicaron las notas, cuando de repente observé, que me había puesto un 4,5. Estaba indignada, con lo que había «trabajado». Llame a la puesta de su despacho, entré y le pedí explicaciones de los sucedido. Me comentó que no había hecho todo lo que él había mandado, por ello si quería en futuras pruebas, sacar buena nota tenía que hacer todo lo que él decía. Me parecía increíble, pero bueno, acepté. Asimismo, la revisión del examen, esta vez sería en el Hotel Maravillas, muy cerca de allí. Entendí perfectamente lo que quería, y yo estaba dispuesto a ello. Así pues, quedamos en el Hotel a las 22:00 horas en la habitación 214.

Para la cita, me arreglé bastante, me depilé entera, también la entrepierna y me puse muy provocativa, con un vestido rojo, tacones, y muy pintada.

Llegue a la habitación mencionada, llamé a la puerta, entré, él se encontraba sentado en una silla, llevaba una camisa y unos vaqueros, era la primera vez que no le veía en traje.

Me comentó, si esta vez iba hacer lo que él decía, yo le dije que sí. Entonces ponte de rodillas. Me puse ante él, se bajó la bragueta se sacó su pene y me puse a chuparlo. Al rato se levantó me puso en la silla que estaba antes sentado, con mi culo hacía fuera. Me subió la falda y me bajó el tanga rojo que llevaba, me la fue a meter, pero de repente me di cuenta, y se lo dije, sin condón nada de nada. El me dijo que a él no le gustaba sin condón, y que si quería aprobar??? me estaba haciendo chantaje, comente que por lo menos no se corriera dentro. Me dijo que ya vería, pero que no le diera ordenes, a lo que yo acepté. De repente, fui notando como su pene se asomaba a mi vagina, poco a poco lo fui notando cada vez más dentro, hasta que lo metió entero. En un momento me estaba dando golpes con la cadera cada vez más fuerte y rápido, me estaba follando el profesor, y a mí me gustaba. Al rato tuve, un orgasmo, y poco después me sacó la polla, me dio la vuelta y me dijo quiero que me lo comas todo. Empecé a chupársela y en poco se corrió, llenándome la boca de su leche, tenía que tragármelo, me daba mucho asco, era un sabor amargo, pero me lo tragué, por lo menos no se había corrido dentro de mí.

Tras unos minutos hablando, me acompañó a la cama, empecé que rápidamente se le estaba poniendo dura. En un instante me estaba quitando la ropa, en otro estaba encima mío y al rato me la estaba metiendo. Me folló en misionero, cada vez más rápido, hasta que empecé a notar algo húmedo y cálido entre mis piernas. El muy cabrón se había corrido dentro de mí. Yo me levanté enfada, me fui al baño a lavarme, mientras se escurría el semen por la pierna. Me enfadé bastante, yo no tomaba ninguna precaución. Me dijo que no preocupara, abrió un maletín que tenía.. me dio una caja, era la píldora del día después. Me dijo que me la tomara y que me fuera, me la guardé en el bolso y me fui por la puerta, antes de irme me dijo que en dos días habría examen, que yo ya tenía sobresaliente.

Al llegar a casa, metí en google el nombre del profesor, se trataba de un niño de papa, tenía su familia mucho dinero, eran empresarios.

Al día siguiente, se celebró el examen, como era de prever saqué la nota más alta.

Un día volví al despacho del profesor, le pregunté que si tenía que hacer algo para sacar una matrícula de honor. Me dijo que me pusiera en la mesa del despacho a cuatro patas, así hice, me bajó el pantaloncito corto que llevaba y el tanga, escuche como se bajaba la bragueta y en un instante, la tenía dentro de mí.. así estuvo un buen rato hasta que se corrió… la sacó y me subió el tanga y el pantalón, noté como se manchaba todo pero me dio igual. Abrió el cajón de su mesa, sacó la píldora , me la dio y me dijo que me fuera, mañana continuaríamos.

Así pues, al día siguiente sobre la misma hora regresé al despacho, esta vez llevaba una falda muy corta negra. Nada más entrar me dijo que estaba muy guapa, tras conversar un rato me dijo que íbamos hacer algo nuevo, me quedé expectante, con bastante curiosidad. Me propuso que me subiera a su mesa, me pusiera a cuatro patas, me bajó el tanga por las rodillas y me subió la falda, me puso con el culo en pompa… Abrió un cajón y sacó un bote de lubricante, se echó un poco en el dedo y me lo pasó por el agujero del culo, continuó masajeándolo, hasta que fue metiéndolo poco a poco, hasta que entró entero. Luego siguió jugando con otro dedo, hasta que me metió el segundo, la verdad que me dolía un poco, pero estaba expectante. Continuó dilatándome bien el culo, abriéndomelo bien, durante un buen rato, hasta que se bajó los pantalones y los calzoncillos, se echó bastante de lubricante en su enorme polla dura. La acercó a mi agujero dilatado por los juegos previos y fue metiéndola, poco a poco, acostumbrándose a mi culo. Me dolía bastante, pero él la metía más y más, hasta que estuvo toda dentro, luego comenzó a mover las caderas, haciéndome un mete saca, al principio muy lento, luego más rápido. Me estaba reventado el culo, me dolía bastante, le pedí que parara, me dijo que esperara, al poco tiempo, empezó a gemir, y noté mi culo por dentro muy cálido y húmedo, se había corrido, sacó su polla, cogió unos pañuelos que tenía se limpio su polla y mi culo, nos vestimos y me fui. Al día siguiente en clase, no podía sentarme en el pupitre, me dolía un montón mi culito, me lo había reventado el muy cabrón.

Así las cosa, la relación que empecé a tener con el profesor me daba mucho morbo, me ponía muy cachonda, sobre todo cuando iba a sus clases, y le miraba, nadie podría pensar que unas horas antes o después, ese profesor tan serio, se estuviese corriendo en mi…

Finalmente, llegó el día más importante, el examen final de junio. La tarde antes del mismo, fui al despacho de mi profesor, iba en falda, y antes de entrar me quité el tanga y lo guardé en mi bolso, quería que no olvidara que tenía que ponerme la nota más alta de la clase, nada más entrar, sin mediar palabra me puse de rodillas, abrí la bragueta del pantalón, le bajé el pantalón y los calzoncillos, y me metí su polla en mi boca, la noté como me crecía en mi boca, se la estuve chupando con mucho ritmo un rato, hasta que paré, me puse encima suyo, me metí la polla en mi vagina, y le estuve cabalgando, él no tenía que hacer nada, solo disfrutar. En poco tiempo, noté como mi conejito estaba húmedo y caliente, ya se había corrido, me levanté y me fui, no antes sin que me diera la píldora y me la guardara en el bolso.

A la mañana siguiente, realicé el examen, la verdad que no tenía ni idea, no estudié nada, pero sabía que estaba hecho. Unos días después, salieron las notas, sorprendentemente saqué un cinco, estaba muy enfadada. Fui hablar con él, me dijo, que él era muy exigente, y que no solo por follar y chupar bien le iba a poner mejor nota. Que me fuera y que si quería volver que solo fuera para follar con él. Estaba muy enfada, me marché, me sentí totalmente utilizada, y además sin conseguir mis objetivos, aunque por lo menos había aprobado.

Al cabo de dos meses, observé que no me bajaba la regla, nunca llegué a tomarme las píldoras, todas me las guardaba en el bolso. Me hice las pruebas del embarazo y dieron positivas. No sabía qué hacer, esperé unos meses, pero cuando mi tripa cada vez era más grande, me armé de valor y fui hablar con él. Tras verme lo gorda que estaba, le comenté que me había quedado embarazada, que era suyo, se sorprendió muchísimo, ya que siempre me había dado la píldora. Por ello, pensó que no quería tener problemas en la universidad por follarse a una alumna, así pues, me propuso que dejara la universidad, y a cambio me pasaría todos los meses una pensión bastante elevada, pero con la condición de que no dijera nada, yo como no podía ser de otra manera, acepté.

Asimismo, me comentó que le ponían muy cachondo las gordas embarazadas, y que me quería follar… no sé cómo fue… pero al rato estaba él encima mía metiéndomela, lo bueno que ya no me tenía que preocupar si se corría dentro o no… finalmente lo hizo dentro como a él le gustaba…

A partir de ahí empezamos a vernos más a menudo… hasta que terminamos siendo pareja… a día de hoy es el tercer hijo que tengo con él…

Una cosa tengo que confesar, desde el principio quise quedarme embarazada de él, no tendré una carrera… pero he pillado al profesor ricachón…

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